El tomate, que llegó a España procedente de América en el siglo XVI, tardó en ser considerado comestible. Se le atribuían propiedades alucinógenas y se cultivaba como planta ornamental. Fueron los franceses, dos siglos más tarde, quienes le dieron la fama de alimento afrodisiaco.
INGREDIENTES:
1kg. de tomates maduros, 2 cebollas o cebolletas, 4 dientes de ajo, 1/2 vaso de nata líquida, 1/2 cucharadita de azúcar, 1/2 l. de agua, 4 hojas de albahaca, 3 cucharadas de aceite de oliva, 16 rebanadas de pan y sal.
PREPARACIÓN:
Pica las cebollas y filetea tres ajos. Rehógalo todo en una cazuela con el aceite. A continuación, trocea los tomates e incorpóralos a la cazuela. Rehógalos unos minutos y vierte el agua. Deja que cueza a fuego lento durante 20-25 minutos con un poco de sal y azúcar. Pasado este tiempo, tritúralo con la ayuda de un pasapurés o batidora.
Añade la nata y rectifica de sal. Al servir, añade costrones de pan frito untados con el ajo restante y la albahaca picada. Se puede servir fría o caliente.
*** Para mi gusto, la nata le quita mucho sabor al tomate. Yo no tenía albahaca fresca, y le eché seca. El pan lo tosté en la tostadora y después lo unté con ajo. Así que si eliminamos la nata y no freimos el pan, sino que lo tostamos, es una sopa bastante ligera y con pocas calorías.´
Espero que os haya gustado.
Que buena tiene que estar esta sopa, tiene muy buena pinta. Estoy de acuerdo contigo en la anotación de la receta respecto a la nata, aunque yo si tostaría el pan, que rico!!!!
ResponderEliminarSí, el pan lo he tostado en la tostadora, en lugar de freirlo en sartén. Igual no me he explicado bien. Besos.
ResponderEliminar